Utilizando las artes, actividades recreativas y los círculos de palabra, se apunta a promover habilidades para la vida, el diálogo intercultural, el fortalecimiento de la identidad cultural, el cuidado del medio ambiente y la soberanía alimentaria. Este espacio cuenta con voluntarios de diferentes disciplinas y practicantes de diferentes licenciaturas. Se ha logrado impactar a cerca de 700 personas entre niños, jóvenes y mujeres. Este proyecto ha sido reconocido con: